Enfermedades Sociales

27 de Febrero del 2009 a las 18:35:07 0 Leído (846)

Desde la experiencia de la vida encontré un entorno social desequilibrado, despertándome curiosidad el mundo interno del hombre y la relación con su imagen externa. Esta realidad produjo sentimientos y sensaciones que han sido plasmadas en cada pincelada de la serie de obras que completan este Trabajo Final titulado “Enfermedades Sociales”.
Con una visión diferente a la de la medicina, “las enfermedades sociales”, y con un enfoque personal, las vinculo a las patologías del alma. Enraizadas en los pecados capitales deforman al hombre convirtiéndolo en un mounstro.
Esta deformación es la que utilizo en mis personajes, realizando un juego morfológico con partes del cuerpo humano, creando nuevos seres que incluyen además en algunos casos, objetos materiales como partes orgánicas. Distorsión que nos hace reflexionar sobre la deshumanización de este tiempo en que vivimos.
Actualmente con la aceleración en los avances tecno-científicos en el ámbito del macrocosmo y la poca atención o hasta el descuido del microcosmo, entendido este como el mundo interno del hombre se produce un desfasaje.
Justamente es el avance de estas investigaciones en los medios que están pensados para estar a su servicio, se produce una critica en tal sentido, que por el contrario no es una critica al avance tecnológico como tal, si no al desfasaje que se va produciendo, el cual crea una situación de vacío interior ante la incapacidad de usar aquellas creaciones con sabiduría.
En el mundo industrial tecnificado y su perfeccionamiento, el atraso del hombre ante este aceleramiento, marcan la decadencia en los valores humanos, como así también el cambio repentino donde se da la relación adultos – niños. En la familia los niños poseen más conocimientos tecnológicos que los padres, los cuales quedan excluidos del mundo tecnológico.
Según los aportes de José Kentenich , se refiere a las consecuencias polivalentes de la transformación en la persona , una falta de seguridad interior, junto a una independencia y autonomía exteriores, y un creciente sentimiento de inferioridad. Cree encontrar esto en el desarraigo presente en el contexto familiar, en la falta de hogar espiritual. También nos comenta que el valor de comunidad ha desaparecido. .(Cifr. Kentenich,1999,85).
Gabriel Marcel concuerda con la visión del padre José Kentenich cuando se refiere a la situación familiar, dice que corre el riesgo de convertirse en medio técnico. Al trabajar la mujer a la par del hombre, los hijos se encuentran mas o menos abandonados, y se desarrolla en muchos casos una especie de animosidad reciproca entre padres e hijos.
La perdida de ciertos valores está presente en este ejemplo del tipo de familia actual, donde los valores como principios de enseñanza tradicionales inculcados de padres a hijos, han sido reemplazados e impuestos por los medios masivos.
Recordemos lo que escribió Chesterton al comienzo de su ortodoxia:” El hombre insano es aquel cuya razón no tiene raíces y funciona en el vacío”.( Marcel,1955, 87).
Los fondos negros utilizados en la composición de las obras de esta serie, representa ese vacío del que habla Chesterton, un vacío presente en el Barroco que despierta angustia, la angustia que nos habla Pascal, un miedo, incertidumbre, con el desfasaje del hombre como centro del mundo, consecuencia del descubrimiento de Copernico, que la tierra gira alrededor del sol, y que el hombre como no era el fin de la creación ni el centro del mundo, que tampoco existía ningún centro estable y que el universo estaba constituido por tantas partes iguales, y de igual valor, cuya unidad se mostraba exclusivamente en la general validez de las leyes de la naturaleza.
El universo según esta doctrina era infinito, unitario, algo continuo y organizado, el hombre se convirtió así en un factor pequeño. De esta conciencia del universo grande y dominador el hombre se siente capaz de dominar las leyes naturales.
Hemos heredado de la concepción bíblica de que la naturaleza esta al servicio del hombre para poder manejarla, una pretensión humanística ontologica moderna. Lo principal de la realidad de lo humano, lo otro seria aquello que emana la esencia de lo humano. De esta esencia que nace la ciudad y todo aquello que nos aleja de lo natural como el bullicio material, que hemos creado. La relación ciudad-naturaleza marca dos puntos de vista, para el citadino una vaca es naturaleza, para el campesino es un producto.
El citadino actual se ha encapsulado en el mundo artificial creando un abismo con el mundo natural, una situación bélica los separa. Cuando la naturaleza se despierta con todo su furor haciendo sentir su presencia, se toma conciencia de su existencia.
Otro corte con la naturaleza se establece en la concepción antigua de la relación día-noche y noche-muerte, esto cambia con la ciudad iluminada, la gente determina cuando es de día y cuando de noche. Por lo general esa relación estaba más relacionada con la idea de lo religioso.
“ kant , plantea que para tomar en propiedad un terreno, solo se requiere delimitarlo, la agrimensura seria la condición primera de dominio de un terreno. La traza reticular de las calles es la forma primitiva de ese sistema”
Herkovich en su definición de cultura nos plantea El hombre se mueve en dos escenarios, el natural o hábitat, y el social, el ambiente natural y el social. Define así a la cultura como la parte del ambiente hecha por el hombre, dice que no hay hábitat natural, todo ha sido transformado en ambiente.
Hay una sustitución de la ciudad por la aglomeración, que es algo así como un desarraigamiento corporizado, el lazo vital que unía a los seres a su hábitat se ha roto, ya no son considerados allí, sino como unidades de rendimiento, esto es , como maquinas cuya necesidad se hace sentir en tal o cual punto por razones ligadas a una economía general, sin tener en cuenta lo que esos seres maquina puedan sentir. El ideal consistiría pues, más que en un adiestramiento para transformarlos de manera que esos sentimientos o exigencias se atrofiasen o desaparecieran finalmente.
El hombre se ha ido descristianizado y deshumanizando, ha cambiado una concepción de la existencia que tenia sus raíces en la religión , se ha desfasado también la visión antropocéntrica, y esta acentuándose la tecnocracia y el tecnocentrismo, la adoración a la tecnología, la maquina como centro del mundo.
El hombre ha perdido identidad, en este mundo tecno- científico los hombres se han vuelto bellamente marginados por el mismo sistema que han creado, un sistema que los considera como entidades numéricas.
La falta de identidad es característica del hombre – masa, un tipo hecho de prisa, montado sobre unas cuantas y pobres abstracciones, y que es idéntico en el mundo globalizado. Desde esta visión podemos mencionar lo que el pintor y escritor Jhon Berger dice “ sobre los efectos reales de cierta política en los seres humanos. Sobre los horrores de esta época , la fragmentación, la falta de futuro. Sobre esos seres que están presentes pero ausentes, porque nadie repara en ellos y son tratados como desechos del sistema. Y hoy, cuando miro para atrás, observo que siempre me sentí atraído por personajes, no necesariamente marginales, pero que están excluidos de los ámbitos que frecuentan los poderosos, tanto políticos como académicos.” (Cifr. Platonov, p. 10).
Es un hombre vacío de su propia historia, sin entrañas de pasado y por lo mismo, dócil a todas las disciplinas llamadas internacionales. Mas que hombre es una caparazón de hombre, carece de un dentro, una intimidad y un yo que no se puede revocar. Esta siempre dispuesto a fingir ser cualquier cosa, tiene solo apetitos, cree que tiene derechos y no obligaciones. La corporizacion mercantil necesita un individuo que trabaje duro, siga una carrera, acepte la gratificación retardada, que sea un hombre de organización para alimentar el sistema. Los valores de este hombre son el disfrute instantáneo, la moral de lo divertido, la confusión entre autorrealización y auto gratificación que tienen su origen en el capitalismo.
Es un hombre fácilmente manejable según las leyes que regulan el mercado global, el cual crea necesidades impuestas.
La armonización del sistema de necesidades de consumo con los de la producción se rompe en la postmodernidad, ya que el sistema de producción esta saturado, y el sistema de necesidades esta satisfecho. Se crean más productos en el mercado y el sistema impone nuevas necesidades de consumo que no son esenciales.
En la diversidad de necesidades, el sistema el mercado su único potenciador, se establece una pluralidad de distintos sistemas de necesidades, siendo necesario sacrificar algunas de ellas, por la satisfacción de un deseo y cumplirla de manera sustitutiva o mediata, a través de la satisfacción de otras necesidades, que se postulan o aparecen como equiparables o equivalentes.
Existen dos rasgos principales, de la psicología del hombre masa, la libre expansión de sus deseos vitales, por tanto, de su persona, y la ingratitud hacia cuanto ha hecho posible la facilidad de su existencia. Estos rasgos responden a la psicología del niño mimado, da la impresión de un ser que todo le esta permitido y a nada esta obligado.
La masa se ha plebeya o aristocrática, tiende siempre, por afán de vivir, a destruir las causas de su vida.
Antiguamente los calendarios estaban hechos para defenderse de las catástrofes. En la actualidad hay miedo y atracción por la muerte, fascinación por la catástrofe. Es muy clara la fascinación de la gente por la muerte, cuando prende la televisión para ver las noticias, solamente las catástrofes son noticias. Hay una necesidad de vivir una muerte diaria.
La morbosidad del disfrute de la muerte, lo vemos en la creación de parques temáticos o museos, que fueron lugares donde ocurrieron holocaustos, allí se combina lo sagrado y lo económico.
Cualquier objeto puede llegar hacer una bomba. Es un ejemplo de cómo la era tecnológica está en contra de la vida humana. La guerra tecnológica ha crecido en atributos y es contigua a la vida diaria.
La masacre tecnológica usa y destruye sus artefactos mas sofisticados. Hacer chocar un avión con un edificio. Un festín oscuro, se ataca la técnica con la técnica.

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