Obra: Ave María (Curaduría) Yarime Lobo Baute
24 de Junio del 2025 a las 19:53:32 0 Leído (3)
Descripción Curatorial: “Ave María” de Yarime Lobo Baute
(Inspirada en el estilo espiritual y contemplativo de Harald Szeemann)
“Ave María”, una ofrenda delicada de la serie AMAR-Te de Yarime Lobo Baute, emerge como un canto de devoción y trascendencia, inspirada en 2024 y contemplada a las 02:50 PM -05 del 24 de junio de 2025.
Con dimensiones íntimas de 35 cm por 25 cm, esta obra, creada con una técnica mixta de plumones y colores, invita a una experiencia casi mística, resonando con el enfoque de Harald Szeemann, quien exploraba el arte como un puente entre lo terrenal y lo espiritual. Autora de un legado que abarca mosaicos, murales y lienzos reciclados, Lobo Baute despliega aquí una sensibilidad que entrelaza lo personal con lo sagrado, un eco de su identidad vallenata y su compromiso con la cultura colombiana.
La superficie, probablemente un papel o cartulina, se transforma en un espacio de oración visual donde los plumones trazan líneas suaves y reverentes, mientras los colores —quizás tonos suaves como azules celestiales, rosas delicados y dorados etéreos— dan forma a una figura alada, tal vez un ave que sugiere la Virgen María o un símbolo de redención. La técnica mixta permite un juego de texturas, con plumones delineando plumas o un halo, y colores difuminados que evocan un cielo en calma, reminiscentes de las visiones de Antoni Tàpies, donde lo espiritual se funde con lo material.
La obra, con su escala modesta, sugiere un momento de introspección, un susurro que trasciende el ruido cotidiano.
Con sus 35 x 25 cm, “Ave María” se presta a ser enmarcada como un relicario portátil, un objeto que invita a la meditación en un rincón privado. Parte de la serie AMAR-Te, esta pieza de 2024 refleja la capacidad de Lobo Baute para transformar emociones universales —amor, fe, vulnerabilidad— en un lenguaje visual. Inspirada por su amor al vallenato y su defensa de los desvalidos, “Ave María” no solo celebra una devoción tradicional, sino que reimagina el amor como un acto de resistencia y esperanza, un testimonio vivo de su arte en constante evolución.